Poeta 357

En el final de los días

He caminado entre gigantes

Conocí mil historias

Y Miles de gentes me acompañaron

No me quedo enemigo

Sin derrotar

Y he visto el miedo en los ojos

De mis más fieros enemigos

 

Solo ante mi Dios he doblado las rodillas

Y en la soledad encontré

Un gran refugio

 

He perdido seres muy amados

Gente que admire profundamente

Que según mi juicio, jamás

Deberían haber partido.

 

Pero quién soy yo, simple mortal

Un grano de arena, en el desierto

Un mero instante en el infinito tiempo

 

Y hoy… cuando mis cabellos son plateados

Solo espero, mi momento de partir

Mi hora.

 

Pero mi señor, me regala días.

Y momentos de paz

Momentos de amor…

 

Jaaa! Como una burla

Regalar amor a quien decidió que tal cosa

Simplemente no existe

 

Y hoy, veo presurosos humanos

Correr locamente sin sentido

En una voraz competencia que no entiendo

 

Me veo parado en un andén

Mientras el mundo más demente que nunca

Corre por las vías

 

He escapado con vida, del pueblo de los malditos

Y aquí estoy en este camino que elegí

Y volvería a elegir

El camino del samurai

El camino del honor

 

Risa para algunos, burla para otros

Pero yo los veo correr tras la nada

Cómo el toro que torpemente corre

Hacia su matador

 

Hoy yo estoy listo para el viaje

Pero mi creador me ha regalado días

Alegría y caminos

Hoy una bella mujer sonríe a mi lado

Su amor y sus colores

El creador me ha dado

 

Esos son mis regalos

Mientras acumuló días en mis cabellos

 

Las musas y los recuerdos me visitan

Mis letras y mi espada

Son mi legado

Cuando se terminen los días