Escribo, a pesar tener del corazón dolido
Escribo, con dos lágrimas cayendo de mi mejilla
Escribo para agradecer a la vida
Para crecer y llegar hasta el horizonte deseado
Si escribo es por la razón no mesurada
De inmortalizar la voz que por años llevo apagada
De darle vida a monstruos internos
Y sacar las culpas de tan cruel guerrero
Oigo la lluvia gotear por sobre mi pluma
Y formar un mensaje empapado de amor
Hacia figuras que han cimentado huella
En flores nocturnas, sedientas de pasión
Lluvia que escribes tras mi cráneo de la suerte
Dame la señal para eternamente vivir
Dale fuerza a mis palabras sencillas
Que se pierdan sin eco, rumbo al porvenir