Nuestras almas juntas en el taciturno de la noche
Suave brisa que recorre mi cuerpo , prevalece en mi interior.
Respiro aire fresco
y persigo tu dulce olor.
Callada y sensible te encuentras
en espera de un sutil momento
Intentando aclarar tus pensamientos.
Un llanto cabalgaba esa noche
la húmeda y espesa marea acoge mis lamentos
la desgracia de tu huida es mi tristeza inaudita.
Ya todo claro está, tu búsqueda comenzará
Nuevos caminos se presentan
Y en ninguno de ellos estoy yo.