El silencio dentro de las horas multiplica mi angustia y de ellas se alimenta algo vagabunda. Mas cuando pienso en llorar solo se pierde en el intento de dejarme.Asi caen las gotas algo frias para ahogarme.
El juego es siempre con las horas hacia atrás y ahí estoy en un rincon de la casa observado ese viejo reloj.
Me rodean espectros vuelvo incauta a los reflejos de mi espejo... mi imagen se vuelve a percibir como una sombra atormentada.