Debo admitir, que me inunda como un rio que se desborda , la alegría ajena;
Más sin embargo , es de tristeza y nostalgia tales reacciones...tal vez mi alma se nubla ante el destello y la emoción de un corazón ilusionado.
Pudiera sentarme en la orilla del abismo y quedarme ahí contemplando el vacio de este sentir.
Si..en verdad es un dulce pero doloroso sentimiento ver la alegría ajena, ahí expectante y nubia, llena de grandes esperanzas y latidos cargados con alta dosis de ilusion.
Arde alma mia..arde hasta que se consuma este momento
Arrebata de mi con comida y bebida , los estragos de verme sentido asi.
Sofoca el dolor acumulado por ese amor que no fue, por ese beso que no se dio, por ese perfume que no toco mi piel.
Dame una solución carnal, para curar esta herida, aunque bien sabre que solo es un momento de paz.
Si...tal parece que mis pasiones son mi antídoto ante la dicha y la felicidad de la puta alegría ajena.