Luis Rayo

Te vi del brazo del otro

 

 

 

Te vi del brazo del otro,

llena de alegría

con la mirada tranquila

sabiendo que no pasa nada.

Más las maldades de la vida

nos llevaron a encontrar

tu mirada con la mía.

La tuya coquetona,

y medio sonrojada,

que con mensaje de hiel

me decías ya sin rubor alguno:

“me fui con el otro”.

Mi mirada quedó helada

Sentí un frío como ninguno.

Entonces, el cielo

se estrelló contra el piso.

Los cánticos guardaron silencio.

Mudez sepulcral

en una tarde de invierno.

La lluvia no cesaba

Ni el dolor de mi corazón.

Que día tan triste.

Y se dieron las cosas

sin ningún despiste.

Y todo por no haber alpiste.