Sabes a consuelo
a amor eterno
a sal pura de mar abierto.
Sabes a embrujo etéreo
a flor de invierno
que aunque fría
calienta mi cuerpo.
Sabes a versos de amapola
adormecedora
a la cálida luz de la luna
a vuelo de altura
a adrenalina pura.
A deseo, a placer
a intensas entregas
que no logro entender
y no puedo tener
a ángeles blancos de amanecer.
Sabes a sol, a brisa tierna
a pasión
a buena intensión
¿Sabes?
Ven a hacerme el amor.