Para qué ser aire,
sino me respiras.
para qué esta poesia mia ,
si tus oidos se cierran.
para qué extañarte si no llegas,
ni mucho menos das esperanza.
para qué hablarte de amor,
cuando ni miras a los ojos.
para qué soñar con vos,
si en la realidad me ignoras.
para qué las palabras,
si las arrojas al viento.
para qué gastar tinta,
si vas y no te quedas.