Higgs.

Sábado cualquiera.

La luz entra por la ventana

Y son las cuatro de la tarde

Aun sigo acostado, pero pensando

Aunque la música del vecino me distrae

No sabría decir que canción es

Ni cual podría ser su autor

Pero hubo una frase

Que llamo completamente mi atención

Era “Aunque el hierro no llore, también se oxida”

La sutileza de su figura retórica

En ese instante me pareció exquisita

Un goce en la satisfacción

Cuando ocurre algo relacionado con lo que pensabas

No importa que tan fuerte veas a alguien

La imagen de frivolidad en su mirada,

Las acciones premeditadas y calculadas

La emoción yacerá tras lo que oculta

El silencio pedirá a gritos ser escuchado

Mientras la soledad pedirá ser abrazada

No recuerdes tanto dijo mi abuelo

Quien hoy se olvida de mi nombre

Hay más que ver de lo que veo

Hay más verdad detrás de lo que creo

El llanto interno, la lluvia y el clima

La vida un cubo de hielo

Que refresca la boca de un joven en verano

Sin saber la ilusión y solo el acto.

Una nube pasa por la ventana

Y vuelve a llamar mi atención

Desde el cuarto piso en mi habitación

Un pájaro posa en mi ventana

Antes de caer al vacío

Y quién sabrá el resto de mi día