Entrevisto tu mirada
sin que apenas diga nada
abres los ojos y clamas
un derroche de nostalgias
Beso tus labios de lejos
imaginándote cercana
ahí en el segundo vacío
víctima de las ansias.
Colaboro con la autoestima
de arroparte en madrugada
de que sientas mi calor
a tantas millas de distancia.
Y sé que me buscas quieta
y me hablas callada
invitándome al enigma
que delata tu alma.
Por qué me me tratas a mí
musa trasnochadora e incauta
ahora que después de vernos
buscas sembrarme en tu cama.
Si no sabemos lo real
si no sabes tanto o nada
o quizás quieras saber
que tu figura me arrasa.
Mas vivida que yo
mas necesitada
de este fuego que siento
cuando tu sonrisa me mata.
Vituá.