Y extendió las manos
En busca de lo que no encontraba
Y no lo encontró
Sabía que en algún sitio estaba
Y lo buscó, y buscó
Atravesó mares y rios
Hasta las montañas más altas subió
Imploró al cielo
Nadie le contestó
Mas el corazón le hablaba
Y le decía que no cesara
Con sus manos blancas
A tientas andaba
Ciega y muda de sentimientos
Pero el corazón palpitaba
Así que bajaría hasta el mismísimo infierno
Para encontrar lo que buscaba
Locura, cordura
Para hallar lo que necesitaba
Sus manos de nuevo extendió
Ciega y muda de sentimientos
Un camino desconocido
Contra el tiempo
Emprendió...