Aquí estuvieras
Haciendo del viento, un temblor en mis manos.
Aquí estuvieras, a estas horas, aquí.
Descalza, desnuda, despojada sobre mi.
Sin embrago aquí estás, en la cara y nombre de todas,
Pero ninguna es la tuya.
Aquí estás, en las siluetas del humo,
Y en el amargor de una cerveza.
enflacando mis ojos con cada la que viene,
Poniendo cerrojos en cada arteria de mi corazón.
Pero allá estás desabrigada,
Pintando un aire que no es mío con tu voz,
y quebrantando mi corazón a mil por segundo cuando te pienso.
Allá estás, siendo incendio, en unos brazos que son ruina.