ME DUELE DECIRTE ADIóS.
Anclado en la memoria, la danza de un recuerdo
explosión de arco iris, con alas de mariposas,
los besos discurriendo la desnudez de un pétalo
y en los ojos chispeantes se nos van las horas.
Allí robaste mi calma y mis noches de sueños,
con las alas queriendo, y por necia es la distancia,
¿Qué es mi vida ante ti? parada siempre a lo lejos,
te pienso todo el tiempo sobre el desván amada.
Amada por tu anhelo, pues; te amo con el alma
la que llora en sus brazos este imposible amor,
ese que nunca logra noches sino que extraña.
Y los labios son quienes mueren diciendo adiós,
me tiembla el corazón y un arco iris hoy desgaja,
¡Qué tristeza! esta mía; mientras vueltas da el reloj.