Un instante de olvido es letal maldición,
Se duermen las memorias que hicieron historia
En tu corazón y el mío. Y se muere la pasión,
que una vez fue el motor, que agitó el amor
anhelado de dos corazones heridos.
El olvido brota de un corazón perdido,
Entre dos amores diferentes,
Uno que lleva a la muerte y el otro que sigue vivo.
Y discurre el sentimiento entre rechazos y mimos
Sabiendo que uno no la quiere y el otro está herido.
Y el corazón que incierto el amor pierde,
muy cerca están de la muerte
sus memorias más fuertes en el mar del olvido.
Olvidaras al que siempre te ha querido
Por el que siempre buscaba no volver a verte.
Son tus labios dormidos estuario de tu dolor.
No hay canciones, no hay quimeras,
No hay pasión en tu mirada, se apaga la llama.
Y yo, sufro tu desamor callado,
sabiéndome sepultado
En el mar del olvido sin saber tu intención.
A lo lejos flamean mis ansias, mi codicia, mi ambición.