jorge enrique mantilla

Me bebí tus penas

Me bebí tus penas

 

De tu hermoso y placentero cuerpo, me diste de beber

De tu interior, el alma noble y pura, pude conocer

De la convivencia y procederes, he de comprender

Tus recuerdos y anécdotas, por siempre han de permanecer

 

Me bebí tus lágrimas, que ruedan de tus ojos saltones

Llantos que apaciguan, los anhelos de mis preocupaciones

Tomé del cáliz, el néctar dulce de tus excitaciones

Pétalos que se desgranan, flor hermosa de las estaciones

 

Me embriagué con la lava hirviente de tus erupciones

Volcanes hermosos, que agitan le lujuria los corazones

Acaricié tu selva húmeda, idilio de mis satisfacciones

Penetré el triángulo, que agita del interior de revoluciones

 

Tomé del manantial que riega de frescura tu cuerpo hermoso

Riachuelo que arrastra vida, de pasiones misteriosas

Tomé del mar, las arenas que te llenan de burbujas maravillosas

Olas inmensas que nos arropan, de emociones vertiginosas

 

Me embriagué con el licor, que sale de tu boca ardiente

Labios sensuales, que excitan al deseo abiertamente

Besos soñadores, que succionan elixir cariñosamente

Tomé de tu lengua, el almíbar de tu saliva intensamente

 

Me bebí tu amor excitante, de pasiones placentero

Celos que rompen cadenas, sin muros ni carceleros

En la barra de aquel bar, ser de tus brazos prisionero

Tomar tu alma pura y noble, de espíritu verdadero

 

Me embriagué con tu amor, de pasión de fuego

Que me llevaron por caminos polvorientos de andariego

Solitario y triste, la soledad me arrebata la tranquilidad y el sosiego

Me bebí tus penas, moribundo, sin un adiós, ni un hasta luego

 

“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga junio 15-2019