Trazo sobre trazo, así maquilla el pintor su mundo
Como el escritor que delinea sus sueños en papel,
Uno con el pincel
Otro con la pluma
Ambos fríos instrumentos
Ambos parecidos bisturíes de mundos,
Que con fantástica y absorta fascinación
Envuelven al artífice creador.
Pintor, ¡Quién pudiera comprender tu imaginación!
Quien, poeta, ¿por tus letras conocerte?
No son sino lumbreras de este tétrico mundo
Y profetas de la belleza, pasada y futura.
Muestran cómo ven el mundo
Y cómo, nosotros, deberíamos ver el nuestro.