En esa residualidad nocturna,
Te escribo bajo la influencia
De la sinceridad,
Bajo los efectos de esta silla
Y de estas teclas que dieron tantas letras
Para ti.
Si,
Aun te siento con la residualidad
Que deja una noche de lluvia,
Una noche
Que anhela la hoguera de tus piernas
El calor de tus pechos
Y la calidez de tu alma,
Si,
Aún te tengo como una toxina
En la sangre,
Del cual me libero con los días
Y con alejarme de lo que un día
Fueron nuestros espacios.