AMADÍS

MIS LABIOS TE PRONUNCIAN... (SONETO)



Me gusta contemplarte silenciosa,
y admirar tu belleza y hermosura,
y con pasión cogerme a tu cintura
 sintiendo la caricia de una rosa.

 

Al mirarte te veo esplendorosa
 con esos ojos plenos de dulzura;
y despiertas en mi tanta locura
que te busca mi alma presurosa.

 

Solícita respondes a mi embate,
y sin tregua en frenético combate
me entrelazo en tu cuerpo placentero

 

y ardemos como teas en la lumbre;
y al llegar a la cima de la cumbre:
 mis labios te pronuncian un te quiero.