Cuando quieras,
te regalaré una rosa.
Cuando quieras,
te regalaré un clavel.
Cuando quieras,
te regalaré miles de besos.
Cuando quieras,
puedes ser mi mujer.
Si tú te decides a vivir conmigo
veras, que no vivirás en vano.
Te regalaré miles de cosas,
como te prometí al final del verano.
Vivirás como princesa en un palacio,
con hermosos jardines rosas,
con hermosos claveles
que adornaran tus cabellos,
con perfumados papeles
que adornaran tu alcoba,
que brindarán versos y poesías,
soñando con hermoso pajarillos,
que te brindarán hermosas melodías,
al comienzo de cada mañana