Sanchez ramirez Karen Paublina

Fin.

Llegó el último mensaje, fue tan claro como el cielo en un día de verano.

No me querías, terminabas conmigo y acabaste hasta con mi poesía.

Cerré los ojos para contener las lágrimas, sin embargo empezaron a caer y fueron tan profundas que tocaron las puertas del Seol.

puse tu canción favorita y me deleite recordando tu sonrisa.

Aunque me hacía daño, sabía que esa noche tenía que llorar, para poder al día siguiente sonreír... sin que me sintiera mal. 

Pero para ser sincera, te lloré aún teniendo la peor pesadilla, porque el crujido de mi corazón, no se quitó ni escuchando mi melodía  favorita.