Con mis botas de goma
mariquita el primero,
la carpeta de anillas
dentro del anorak,
a las cinco y treinta
Don Juan, hasta luego,
llegar tarde a casa
para merendar.
En los mares de charcos
mi sueño es el tuyo,
navegando en barquitos
hechos de poliespán,
policías y ladrones
robando minutos,
a las tardes de invierno
cuando era un chaval.
El sol calvo colgaba
frio en el horizonte,
las sombras alargadas
hora de regresar.
No acabar los deberes
y ducharte el primero,
esperando en la tele
que echen el un, dos, tres,
a ver si el concursante
se lleva el coche nuevo,
la cara en blanco y negro
de Mayra Gomez Kemp.
Cada día que pasa
hace casi cincuenta,
recuerdo esos momentos
llenos de libertad,
hoy la infancia se acaba
en un rio de ginebra,
e internet es un planeta
llamado soledad.