No te vayas todavía, aún no sueltes mi mano.
Te necesito más que de ñiña cuando te solía confiar mi cometa para hacerle cosquillas a las nubes en esas tardes de siesta donde me enseñaste lo que es soñar.
No te vayas todavía, aún precisó tu abrazo .
No sé decirlo en palabras pero por más malo que sea mi día, no hay guerra que se resista a la paz que tu me das.
No te vayas todavía, aún me salva tu escudo y así poder enfrentar el lado oscuro del mundo, lleno de miseria y crueldad.
Fuiste, sos y serás mi héroe incondicional.
No te vayas todavía, aún preciso tu guía, libre de pose y maldad .
No hay oscuridad que no se apague si sé que a mi lado estás.
No te vayas todavía, aún déjame retener el barullo en la mesa ;el café en tu falda, los domingos de misa, tu amor incondicional.
No te vayas todavía ,quédate un poco más, déjame ser egoísta que el cielo puede esperar.