En el vaivén del sentimiento
se mece la indecisión.
Si te quiero, a ciencia cierta,
no lo sabe el corazón.
Entre verso y rima,
prosa y verso,
se confunde la Razón.
Qué carajos! Qué tormento!
Confundida estoy.
Entre lo cierto y lo incierto...
A versos te quiero....
Y a versos no.