Como lo predijeras,
cuando apenas y podíamos movernos en esta tierra,
reptando y buscando los recovecos más seguros
de nuestras memorias desleales y desiertas
¿Existe el cielo, existe el agua,
nos llega esa caricia llamada sol?
Y tal pareciera,
que esto se ha vuelto nuestro deporte favorito,
gastando y malgastando a cuentagotas el alma
por no comprender nuestro papel en este sitio
¿Existe la flor, existe la noche,
escuchamos los sonidos del mar?
Cien años de espera,
y la desgracia nos ha alcanzado,
mueren mis aves y mueren mis hijos,
por razones que no tienen sentido,
por razones con sabor a metal,
mueren mis flores, mueren mis nidos,
perecen en aras de desarrollo y libertad
¿Existe el humano, existe el amor,
esperamos estoicos cien años más?