Verano Brisas

MAR - K - 29

El vicio más aberrante de la civilización es el celibato.

Kienes praktikan tan sospechosa disciplina

defienden principios inkisitorios,

y nada más peligroso ke una kabeza fría

sobre un korazón kaliente.

 

Si todos fuéramos célibes la especie no existiría,

algo aterrador para nuestro egoísmo

o instinto de konservación mal entendido.

 

No hay maternidad kon un célibe,

y sin maternidad no hay vida;

esto parece no importar

a kienes se deklaran amigos del celibato.

 

La apología de la kontinencia es kriminal,

salvo si hay káncer en la próstata,

la matriz o los ovarios,

porke lesiona al género humano

y a la naturaleza entera.

 

No nos dejemos engañar de akellos falsos profetas

ke pretenden neutralizar nuestras dichas y kerencias

kon su atake alevoso a los placeres de la vida.

 

¿Kómo hablar de familia y sociedad

kuando se obstruyen sus kanales de konservación?

Una vokación literaria, polítika o religiosa

no justifika la esterilización de los instintos,

pues sólo éstos pueden librarnos

de las enfermedades y una muerte prematura.