Harley Ezel

Escombros

¡Se siente!

cayó todo,

y de repente.

 

Los llantos rodean,

se ve al niño sin gozo,

olas de bloques golpean,

de su corazón cae un trozo.

 

Amarga sonrisa de una anciana

la gloria perdida, sin más colores,

una mañana que no cede el mañana

y las horas solas y largas entre olores.

 

Mirada triste que refleja en un solo triángulo,

manos cerradas que no albergan ninguna esperanza

y hacen formar el insomnio de un silencio y grito nulo.