Escojo una, la tuya
Coreando cae desde el azul
Las estrellas miran,
Y yo las admiro a ellas.
Voy a pedirle que te regale
La risa en el viento
el cielo en tus ojos
La lluvia alegre
y el calor de sus manos.
Bien sabes que mis espinas
Son solo un escudo,
Del falso clamor.