Recuerdos de amor.
Como árbol que en otoño se deshoja
y siente desnudez que le da frío,
así percibo este corazón mío
que de penas de amor ya se sonroja.
Ya nuestra red de cariño se afloja
pretextando que nos llegó el hastío
y que así, las aguas de nuestro río,
de pasión nuestros cuerpos ya no moja.
¿Qué pasó con los besos que nos dimos?
llenando de pasión tanta dulzura,
y que entre ellos tantas veces dijimos:
¡imposible romperse la atadura!
De recuerdos ahora sonreímos
diciéndonos que aquello… fue locura.