Matias 01

CODICIA

Siento renacer en mí a la codicia

por tus manos suaves

y tus labios brujos;

morena dulce y tierna

fecundas el lirismo

en mi corazón

que se aferra a la dulce hebra

enamorada de tu cuerpo

 

Tu pecho es una laguna nebulosa

donde hay paz y hay viento

hay manos como un puerto

donde se acoderan los deseos

y no hay nadie más que un amor

encadenado

 

Cuando no estas,

amo los versos

y miro a la luna debajo de un árbol

me acuesto en el suelo

por todo el tiempo que dura la noche

 

Mi sueño,

se despierta como recién nacido-

uno entre millones-

y se amarra a la vida

entre las hojas sueltas y las ramas;

De flor en flor

y por encima de la ausencia

vibra una mariposa al mediodía

celebrando el amor,

el sueño nupcial del aire apareándose

con tus cabellos sueltos.

 

Pequeña y ligera

vas como navegando en el aire

y todo huele a uva morena,

a trigo maduro,

y pedacitos de piel

que se van embriagando

en su próxima revelación

Los surcos de agua

salpicados en la fiebre del corazón

agitan sus pétalos dulces

con siglos de luces

para todas las sombras

 

Tu lecho lleno de símbolos de tierra

es un laberinto

en que me pierdo hasta llegar el alba