Me esperarán tres luceros al final del túnel
cuando todo termine seguro ahí estarán
cuando mí gastado equipo cedido hace mil años
regrese por sus fueros a su hogar.
Estarán ahí esperando
como yo los esperé
ansiosos como yo estaba
de conocer su mirada
que sus brazos me abrazaran
y me dieran su calor
y un motivo para correr tras suyo
y en mi pecho no cupiera el orgullo
ser su designado cuidador.
Pero no llegaron, algo falló en la entrega
se quedaron ahí en transición
entre la tierra y lo divino
pequeños suspiros nonatos
solo tengo sus retratos
los que en mi mente forjé.
Señor mío, era tu deseo y encomienda
y no se concretó, ¿Qué pasó?
privanzas a cabalidad entregas
lo deje todo en la enmienda
y me vacié en mi oración
No preguntaré más nada
sé que gozan contigo, que ahí están
recogiste sus espíritus queridos
te hacía falta esa dulce verdad
no concibo se deplore lo divino
te arrepentiste de la merced en un pis-pas
Jesús Matus