…y no te conformes
con llenar mis sueños
también
en mis insomnios apareces
Roberto Contreras
Estás conmigo aún y no es delirio
de quererte en silencio vida mía;
hoy por hoy, a cesado mi martirio.
Mi corazón henchido de alegría
se le ve, se le nota: ¡algarabía!
No enciende la tristeza ningún cirio
al dolor aquél -que fue de vidrio-
que ahora por temor se debatía:
No dudes que fue tu amor quien lo mató
por eso yo perdono a mi destino
y, cómplice seré…sin desacato.
Olvidaré al ayer cual pergamino
y diré que eres luz de mi camino,
mientras beso en silencio tu retrato.