Yo quise a una mujer con toda el alma
Ella era mi encanto y mi alegría
Ella era la dueña de mi alma
Y solo en su amor pensaba noche y día.
También fue el consuelo de mi vida
Para mí, solo ella existía
Su imagen no se aparta de mi mente
Por eso yo la quiero todavía.
Un día me dejó abandonado
El supremo se la llevó a su lado
Y yo quedé llorando eternamente
Tanto dolor y sufrimiento
Me hicieron desgraciado.
Ella es la esencia de mi vida
Ella es mi gran jardín florido
La quiero como a nadie he querido
Su recuerdo en mi mente está prendido.
Sus labios me besaban con locura
Temblando de amor a mi oído susurraba
Te amo y te amaré eternamente
A ti, solo mi alma he entregado.