Me pongo a meditar en la armonía
que tienen los estambres de las flores;
también en los hermosos resplandores
que entregan las estrellas cada día.
Escucho melodiosa sinfonía
que brindan esos pájaros cantores,
y pienso que Natura y sus fulgores
convierte nuestra vida en poesía.
Admiro de la luna, la pureza,
que vierten sus estelas luminosas
cantándole al amor y su grandeza.
Figuro que los lirios y las rosas
son rimas empapadas de belleza
que habitan virginales mariposas.
Autor: Aníbal Rodríguez.