FELINA

TOMEMONOS DE LAS MANOS...

No quiero que me sangre hoy la herida,

que sin querer me causaste aquel día,

te acuerdas… cuando la tarde se moría,

mi corazón de dolor se estremecía.

No quiero acordarme de tu agravio,

si lo hago, es porque que no te he perdonado,

no quiero estar sumida en el quebranto,

que se vaya el dolor, tambien el llanto.

Son tantas lágrimas que mis ojos han vertido,

desde el  mismo instante  en el que te he querido.

¡Yo solo quiero decirte... que aún te sigo amando!

Te perdono y quiero que regreses otra vez al nido,

como si nunca te hubieses ausentado.

Seca con tu pañuelo mi rostro abnegado en llanto,

llénalo de besos como si fuera un canto,

que en su melodía me recuerde cuanto me has querido,

así me daré cuenta que las penas se habrán ido.

Hoy que vienes  a mi lado arrepentido

a sanar este corazón tan compungido,

quiero pensar que nada ha cambiado,

que no hay que contar con el pasado,

dejaremos el dolor bien enterrado,

que sea el tiempo se encargue de sepultarlo.

Tomémonos de las manos mí bien amado,

enlacemos corazón con pensamiento,

fundamos nuestros labios en un beso,

demos rienda a este amor arrebatado

que aún nos queda…aprovechando

que nos une el bello sentimiento

que en los dos ha florecido…

No perdamos mas el tiempo

y sigámonos amando,

que aún no ha amanecido.

Felina