Siento tus caricias en mi cuerpo
El aliento de tu boca
Al respirar sediento de amor
El aire sopla lento
Queriendo parar el tiempo
Dejando así las huellas de tus caricias
En todo mi cuerpo
Que arde de deseo de tenerte
Cómo un tatuaje en mi pecho
Que está anbriento
De tus caricias y tus besos
Cuando los dos jugamos a ser traviesos
Ya sin ropa mis brazos son tú cobija
Y en tu pecho desborda un manantial
Que insista a pecar
A ser traviesos no solo un día sino una eternidad