Como regalo especial
les ofrezco un sonetillo
que tiene también el brillo
del soneto original.
Me seduce por igual
por su estructura coqueta
que graciosa y pizpireta
ondula como trigal.
Se dibuja en su silueta
la luz de amor celestial;
que de forma magistral
trina como un pajarillo;
oliendo a flor de tomillo
su rima primaveral.
Autor: Aníbal Rodríguez.