Son mis hojas las que un día
harán sus viajes al volar,
tranquilas, serenas, soñadoras e irreal.
Son mis hojas las que vuelan
sin rumbo, sin final
a destinos inciertos
esperando felicidad.
Son mis hojas las que un día
lloraban sin parar
y ahora ríen, cantan
con solo imaginar.
Son mis hojas las que besan
en un susurro del mar,
que cosas extrañas hay que creer e imaginar.
Pero aunque no tenga concordancia
las palabras brotan igual
dejando a cada paso
el sentir de mis hojas al volar.