Mi viaje, aunque corto, será eterno,
será un viaje con trampas que seguro saltaremos,
será un viaje con palabras, con amor, con sentimientos,
una luz entre sombras, un mirarme por dentro,
unas manos tendidas, unos brazos abiertos
y unos versos inmersos en el mar de mis recuerdos,
versos tranquilos, pausados, versos serenos,
tan serenos como mi mundo,
como la paz soñada
y como los sueños que todos queremos.
No viajarán en mi viaje las agujas, los lamentos,
las palabras sin sentido, la rabia nacida de dentro,
los cobardes, los pedantes y los que no busquen
a Dios en silencio.
Este es mi viaje
y en él deposito mis sueños,
mis anhelos, esperanzas,
ilusiones que aún tengo,
viaje en el que hay muchos viajes,
viaje sin paradas en el que a veces me duermo,
pues la vida a veces te cansa
y a veces se olvida de darte consuelo.
Escuchad amigos:
mi viaje es un verso lánguido
y somnoliento,
verso en el que espero algún día
quedarme dentro.