Y son cosas de la vida,
ya me estoy haciendo mayor,
el tiempo es un cobarde
me estoy haciendo mayor,
y ya se me nubla la tarde
llueven lágrimas en el corazón,
el tiempo no pasa en válde,
los recuerdos son suspiros
que se va llevando el aire
y se apaga la razón,
el alma yace en un tazón
y ya no te quiere nadie,
y son cosas de la vida
trasnóchan las palabras,
el tiempo es un cobarde
y hoy recuerdo con cariño
los consejos de mi padre,
que no he podido poner en práctica
por la ignoráncia del hambre,
de esa juventud que pasa
sin escuchar a nadie,
hoy me duele el corazón
que rendido de dolor al suelo cae
en una humilde esterilla,
ya coge los \"baches \" la memoria
en la carretera de la historia
y meamos en un
\" tiesto \"
entre las pitas, al cielo abierto
en un rincón, escaparate al viento
ya nada rima, todo queda,
mendigos de amor y palabras,
sentados en una triste acera
agotado, pero no cansado
de los años prisionero,
aún tengo en mis manos claveles
y algunas canas en el pelo,
y como Dios es tan Bueno,
¡mira tú, por donde!,
en mi camino yo encontré
a una mujer sencilla y buena,
a la que yo mi amor entregué
ascuas en mi corazón,
musa de mi inspiración,
un ángel de papel
que me dió la vida de nuevo
y también la perdida ilusión,
y a su lado soy feliz como un niño
al que le compran un balón.
La humildad es nuestra casa
rosaledas de flores y sol,
pobres, sencillos y límpios
como así nos quiere Dios,
ese Dios al que adoramos
con la fuerza del amor,
seguimos nuestro camino
sembrando la ilusión,
levantando al que está caído
al que cae en la
\"guerra\" vencido,
al que pasa sed y hambre
en este mundo incomprendido.
Los poetas somos afluentes
que juntos formamos ríos
que van a la mar siempre,
la Esperanza crece y crece
pero ya me estoy haciendo mayor
y no es triste, son cosas de la vida,
la experiencia es un galardón,
aunque cargado de fatigas
damos las gracias a Dios
Aquel que nos dió la vida...