Y es verdad, que poquito cuesta
escribir una bella canción
o recitar un lindo poema
que se cuece en el corazón
y que la vida del pobre alegra
y como rima la ilusión
cuando el amor se pega
hay que llenar la hucha
de palabras bonitas
y tirar al río las penas
que el mundo está lleno de colores
y aún queda gente buena
aún se escuchan los trinos
de los ruiseñores en las cercas
aún navegan las ranas
en el agua azul de la alberca,
y cantan los grillos
entre el trébol de la ribera
y se visten de oro
los trigos en primavera
y cantan los gañanes
dando vueltas en el trillo de la era
y aún hay rosales
que tienen rosas de seda,
y jazmines, y geráneos y azucenas
y el olor de tomillo y hierbabuena
y el amor sigue haciendo castillos
aúnque sean de arena
y hay barcos azules
entre las aguas serenas,
y la sonrisas de los niños
cuando van camino de la escuela
y paraguas cuando llueve
entre la mar y la arena
y se estrenan algunas miradas
de chiquíllas enamoradas
bajo la sombra de la higuera,
aún florecen los amores
aún existe gente buena
que se asoma a los balcones
y que cantan tras las rejas
las zagalas y labradores
de los pueblos de mi tierra,
aún sale el sol cada día
y nos da calor y vida
y gotea el agua fresca
y respiramos el aire puro
si la contaminación no lo apesta
y hay que darle una oportunidad
a la sonrisa, aunque sea pequeña...
Si yo fuese poeta escribiría
cosas hermosas y frescas
y llenaría una enorme arcancía
porque que poquito cuesta
escribir una bella canción
o recitar un lindo poema...
Hoy saco de mi baúl
aquella guitarra vieja
que tiene las cuerdas
en mi corazón...