La vida pasa y mata todo
olvida todo, apaga todo
No es el tiempo el que se va
somos nosotros
fantasmas jubilados del espanto
cansados de cargar
las pesadas cadenas del recuerdo
Una vez fuimos felices
eso pocos lo sabemos alguna vez
construimos arcoíris de pensamientos
cuando todo era claro presentimiento
generoso, brillante, abrigado y ameno
Pero ya nos hemos ido
abandonándonos a nosotros mismos
dejando sin remedio ni retorno
lo vivido a destiempo
olvidando y masacrando las mañanas
con esquirlas de silencios
Alguna vez fuimos jóvenes
éramos radiantes por dentro
e incluso en fracciones de segundos
llegamos a sentirnos eternos
tuvimos en los ojos toda la luz del mundo
y nuestras bocas rieron sin parar
hasta que nos dolió todo el cuerpo
como hoy nos duele el desconsuelo
de sabernos pretérito pluscuanperfecto
La vida pasa
y arrasa con ella todo lo patético
se va haciendo venias
y muecas con aplausos al desacierto
Se va la vida como una puerta
en el vaivén de sus goznes sempiternos
se va, se va y de tanto irse
permanece en reconstrucción
todo el tiempo
Pero a veces la vida se estanca
pudriéndolo todo
y con su latir contamina todo
con su respirar infecta todo
y el tiempo fluye congelándonos de vértigo
y somos como náufragos
en las aguas celestes del Universo
De pronto ya somos del club senecto
y estamos fritos, arrugados y muriendo
pero aún así fuimos felices
como anarquistas
invitados a la defunción del estado
y de todos sus adeptos
La vida es un misterio
y se niega a quien la revende
en bajas esferas a altos precios
se trunca la vida en muerte
cada vez que perdemos el horizonte
del corazón y sus anhelos
La vida es vida
y solo hay que vivirla
aunque de tanto vivir
nos vayamos muriendo