Cuando Sophia nació
El tiempo se detuvo.
Al principio todo fue angustia y desesperación.
Los minutos inclementes se hacían eternos,
Toda una angustia y preocupación.
Hasta que en una linda mañana del
día de la Batalla de Matasiete
Ella en ésta bella isla nació,
Margariteña de nacimiento y
Venezolana por la nación.
Y con esperanza en las manos porque sus puños no cerró
Cuando por fin miré su pequeña cara, mi corazón resucitó.
Jah, cuanta belleza !
Hecha por mi amado Dios y señor...
Cuánta alegría,
Cuánto amor,
Cuánta ternura
Puede provocar
Esa bella criatura
Que nos ha nacido
hoy.
A Jehova Dios, gracias doy
Por ésta bendición.