Si la mirada subes,
hallarás mi corazón escondido
en medio de las nubes;
sentirás su latido
y lo escucharás en cada sonido.
Si viajas algún día,
en búsqueda del hermoso Parnaso;
es la sabiduría
la que guiará tu paso
y te demostrará mi último ocaso.
Si de mí te enamoras,
sentirás la mayor felicidad
cada día, cada hora;
hasta la eternidad
florecerá mi alma en prosperidad.