Voy a enfundarme la guitarra;
me produce frustración,
depresión ,desasosiego
tanto entreguismo
tanta ignorancia ,
tanto desprecio.
Tras eras de clamar en el desierto,
me he perdido en las dunas
agotado sediento y desangrado...
me han robado hasta la cantimplora
y se ha esfumado el último espejismo.
¡Han callado al cantor!
le han quebrado la garganta
y se ha quedado solo,
perdido entre las dunas
de un país desértico y estéril.
Me esconderé en el oasis de los libros,
dejaré que el siroco borre mis pisadas
y las de tantos que siguieron al flautista
hasta el abismo de la farsa y de la ruina.
Izaré las velas de mi nave
y zarparé hacia los mares del futuro;
cerraré mis oídos con poemas,
me ataré a los mástiles con versos
para no escuchar los cantos de sirenas,
de oráculos abyectos .
Y como Ulises,
largaré mi velamen mar adentro
donde las olas de plata me bendigan,
donde la luna le dé luz a mis noches,
donde las brumas no oculten las estrellas,
donde los vientos me empujen hacia Ítaca
en que Penélope espera
para tensar el arco de la historia
y atravesar con sus flechas justicieras
a traidores, rastreros y ladrones
¡trileros de miserias!!