No soy libre, no lo soy
Cómo he de sentirme libre si ni siquiera mirarte puedo a los ojos con amor…
Sí cuando tú lo haces, la distancia imprime la negación para no caer en el error…
Y así…la rebeldía de mi corazón no quiere morirse, el propio latido lo obliga a no apagarse en la prisión…
Quiero no tener que apartar la mirada de vos.
Ah, las mil y una noches que me separan de vos…
Ah, las mil y un razones que no quiere escuchar el corazón…
Y sin embargo,
Quiero poder mirarte.
Y que sólo ello signifique amor…
¡Prisionera soy!
No soy libre, no lo soy.
Aunque así lo crea
Llevo puestos los grilletes,
Las reglas,
La retutación,
La misma razón…
Y sin embargo,
Nada de ello quiere comprender mi corazón…
Por eso…susúrrame…
Susúrrame al oído
Susúrrame esas palabras que no he de comprender…
Ese idioma que es placer.
Susúrrame y haré un oído dedicado a él…
Susúrrame ternura y lujuria
Esa íntima poética que me hará enloquecer.
Susúrrame hasta el amanecer…
Sentir el susurro que eriza la piel
Sentirte aunque estés lejos
Sentirte en mí pensamiento
Singularidad de mi querer…
Tómame y has de mí… la más plena liberación hecha al querer.