Hoy el insomnio se ha instalado en mi cuadrante
oigo a lo lejos bestias mecánicas que transitan por carretera
y pienso que sus feroces rugidos le imploran a Morfeo
se compadezca de mi
pero es inútil
parece que esta noche Morfeo se arrulló así mismo.
Intento hacer un pacto con mis parpados;
en el cuchicheo de una precaria lluvia ,
un cambio de piezas en el ajedrez de la noche,
pero tampoco es suficiente
hoy hasta el grillo me ha negado su serenata.
Me encuentro solo, con mis pensamientos
recreando universos de aquí hasta mis ronquidos
mi calle en silencio
salvo por unas hojas que balbucean en el piso.
Hoy Morfeo devoró mi sueño
se quedó dormido
ojalá no tarde tanto en despertar
mientras
soñaré aunque sea despierto.