Si, has sido dura, resistente a vientos y mareas. El agua resbalaba sobre tí y no sentías absolutamente nada ¡Pero mira tú! ¡Te hizo un surco!
Y sobre el, el viento fue depositando tierra, en ella, nació una planta ¡Ahora no estas sola! ¡Ella te da flores!
Un batallón de pájaros vienen y van, se llevan semillas ¡Ya hay cientos! Que digo cientos… ¡Miles de flores! Alegrando la existencia.
Están repartidas por todo el mundo ¡Tan fuertes que nacen hasta en las piedras!
Ahora, hasta me gusta tener que dártela. Puede que el tuviera razón... ¡Que seas solo una piedra!