Soy quien soy por ti
y no quiero ser otra cosa
más que el vuelo de esa mariposa
que en tu cabello posó.
Tan sólo quiero verme reflejado
en lo profundo de tus ojos,
y besar tus labios rojos que son rosa,
fresca fruta o coral.
Quiero amanecer contigo
caminando por la playa,
disfrutando la mañana
y la espuma de tu mar.
Y probar el sabor de las guayabas,
de las jugosas naranjas
o de esas maduras piñas
que por tu tierra se dan.
Comer todos los días
lo que tus manos preparen,
disfrutar del aroma de una taza de café,
mientras tranquilos charlamos
de las cosas de la vida,
hoy que estamos en el puerto,
casi donde la floresta verdea.
Porque anhelo ser lo que tú quieras,
bejuco, rama, flor o enredadera.
O ser remo, barca, vela,
para recorrer contigo un día
de la mar su inmensidad.
© Armando Cano.