Hoy es uno de esos días, en los que la tristeza me llegó de sorpresa y hace su aparición. Sín previa invitación. \" Haciéndose nuevamente la dueña del escenario de mi vida\".
Arriba el telón! que a primera estrella, \"La Tristeza \". Hace su aparición, y como siempre; luce radiante, como si renaciera nuevamente. Y su actuación es ! Perfecta ! y aparece en el momento sorpresivo.
Cada uno de los espectadores estamos en guardia. La sala esta llena. Y temerosos de cualquier señal; ya que en cualquier momento nos sorprenderá, tocándonos con su mano ingrata y despiadada.
¡Te suplico no me toques!, deja ya de lastimarme con tu amielada mirada. No me convenzas de seguirte, se que es fácil ir tras de ti; pero más difícil será alejarme.
Eres tu la que me pide que la cortege, la que me suplica no abandonarla. Pero yo con mi innata debilidad y poca fortaleza, me confundo y te comprendo, ¡ Te sientes sola! ¡Pero no quiero seguirte ! Eres mala y traicionera. Solo haces daño y arrazas con todo lo que te rodea.
Adios Tristeza, te veo alejarte y mi alma por fín entra en sociego.
Vuelvo mi mirada y me despido de tí, pero tus ojos enrojecidos y tiranos, me dicen ¡Volveré!