Agua, mar, amazonas, un millón de veces mar
mil veces río, siempre vida, río terrestre, río volador
mal entendido, paraíso acuático, el señor de la Selva
en verdad te llamas Paranaguazú, Guyerma o Solimões
Serena dibujas formas ajenas,
vertiginosa esquivas y chocas contra masas existentes,
guardas en tu vientre un tesoro,
das vida a los ¡yo! perpetuos.
Te vistes de grana, azul y celeste
emanas estrellas y muchas veces te exaltas.
Tu cuerpo esta lleno de brazos, risas y caras bellas,
alimentas o anidas hasta lo imposible,
tus habitantes se reflejan en el cielo,
te imploran al calmar su sed.
Eres vida poesía, paisaje y madre a la vez.
Nunca te acuestas, amaneces serena,
por la tarde te agitas y exhalas,
Por la noche te vuelves fría e indiferente.
Has visto crecer el pasado, pasar al presente,
el futuro te ensancha y muchas veces te absorbe para siempre.
En el verde infinito, tu egotismo se comparan con el mar,
torturas tu ¡yo!,
apareces en otro horizonte.
Te quiero no porque te veo,
sino porque recubres mi cuerpo y
calmas mi sed de inspiración existencial.
Por Walter Trujillo Moreno, 13.04.2013 / 27.08.2019
*Amazonas, voces indígenas Paranaguazú (Gran Pariente del Mar), Guyerma; Solimõe,” rompedor de embarcaciones”